Zara (grupo Inditex) fue la primer marca de moda que implementó la tecnología RFID (identificación por radiofrecuencia) para aumentar su eficiencia operativa y mejorar la gestión de su cadena de suministro.
A partir de la identificación de cada producto con una etiqueta RFID y su control a través de toda la cadena de abastecimiento, desde la fábrica hasta las tiendas. Zara obtuvo los siguientes beneficios:
1. Precisión de inventario: la tecnología RFID permite el seguimiento en tiempo real de los artículos y monitorear con precisión los niveles de inventario.
Esto permite a Zara tener una visión más precisa y actualizada de sus existencias, lo que reduce las discrepancias y garantiza que los artículos estén siempre disponibles para los clientes.
2. Visibilidad de inventario: con RFID, Zara puede ubicar rápidamente productos específicos dentro de sus tiendas o almacenes, lo que reduce el tiempo dedicado a buscar artículos y mejora la eficiencia operativa general.
3. Reposición eficiente: la tecnología RFID permite a Zara automatizar el proceso de reposición de existencias.
Cuando los artículos se venden, el sistema RFID permite detectar inmediatamente el cambio y activar una solicitud de reabastecimiento.
Esto ayuda a Zara a mantener niveles óptimos de existencias, reduciendo la probabilidad de quiebres de stock y mejorando la satisfacción del cliente.
4. Auditorías de inventario mas ágiles y rápidas: el uso de la tecnología RFID simplifica el proceso de auditoría de inventario, en lugar de tener que escanear códigos de barras manualmente o realizar conteos físicos que consumen mucho tiempo, los lectores portátiles RFID permiten escanear cientos de artículos simultáneamente.
Esto acelera significativamente el proceso de auditoría, minimizando los errores y liberando tiempo valioso de los empleados para poder asistir a los clientes.
5. Reducción de mermas y robos: la tecnología RFID ayuda a mitigar las mermas de inventario y reduce los robos.
Al monitorear constantemente los movimientos de los artículos, Zara puede identificar rápidamente las discrepancias entre los artículos vendidos y las existencias en la tienda.
Adicionalmente, la presencia de etiquetas RFID actúa como un impedimento para el robo, ya que los artículos se pueden rastrear fácilmente si se retiran de la tienda sin autorización.
Como podemos ver, la implementación de tecnología RFID ha permitido a Zara gestionar su modelo de negocio “fast fashion” con mayor precisión y visibilidad sobre el inventario y mejorar la eficiencia en toda su cadena de suministro, logrando el principal objetivo de cualquier empresa de moda: “responder rápidamente a las tendencias cambiantes y brindar una mejor experiencia de compra a sus clientes”